Lo malo sigue siendo lo malo

Pregunto; ¿Qué diferencia hay entre el maleante que te apunta con una pistola en la calle para asaltarte, a un encorbatado perfumado o a la amable señorita que con una sonrisa lo estafa para gestionarte un trámite?

 
¡Ninguna! ambos son delincuentes, aunque operen en diferentes contextos. Ese que es profesional, que se esforzó en estudiar, que enorgullece a su familia con un título colgado en la pared, es peor, porque no admite lo que es, se esconde detrás de su supuesta habilidad de negociar para hurtar, a ese se le puede considerar un hipócrita.

Y ahora lo llaman “astucia”, ¡mentira! Es estafa y ahora se ha vuelto tan común, que lo ven normal. Deje usted de llamar a lo malo “bueno” porque está faltando también. 

Tanto instituciones públicas como privadas, fueron invadidas por esta plaga, pues, hoy día todo es negocio, incluso tus principios son negociables. Usted que no lo hace, no envidie esas acciones, de que porque tal persona ya tiene carro y casa, a costa de especular a la gente, quisieras hasta poder trabajar allí para hacer lo mismo. Deje de envidiar lo malo. Ahorita lo ve muy bien, viviendo cómodo, pero Dios prepara a cada quien recompensa, conforme a sus obras, pues Él no puede ser burlado.

Luego, después se preguntan por qué tanta desgracia repentina a sus vidas y se atreven a culpar a Dios, sin saber que sus acciones marcan hasta a sus generaciones. Así que mejor, preocúpese porque tan honrado es usted.

A usted que ya es profesional o aspira serlo, el día que usted recibe el titulo hace un juramento ¿se le olvido? A lo mejor lo dijo para cumplir con el protocolo, o por los nervios ni lo entendió, pero lo hizo y con cientos de testigos, de hecho hasta quedo grabado y retratado (si así lo cumplieres que la Patria os premie, pero sino que os demande) como acá, ni uno ni lo otro... pero el máximo juez, el que nada se le olvida, el que inclino su oído para escucharlo ese día, a Él sino se le pasará.

Tenga temor reverente a Dios y deje de valerse de un puesto de trabajo, para estafar, use esa astucia para bendecir y no para pasar por encima de otros para escalar posición, deje de denigrar a los profesionales, porque no todos entienden que ser profesional es un asunto de ejercicio mas allá que de un simple titulo.

Dejemos de criticar a un gobierno, cuando muchos están cooperando con lo que está desangrando a los paises, y eso de llamarlos “licenciado” “ingeniero” “funcionario” “ejecutivo” “profesor” “gerente” le quedaría grande, como hijo de Dios. Reflexionemos sobre esto.

¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce, y lo dulce por amargo! 

¡Ay de los sabios en sus propios ojos, y de los que son prudentes delante de sí mismos! 

¡Ay de los que son valientes para beber vino, y hombres fuertes para mezclar bebida; 

los que justifican al impío mediante cohecho, y al justo quitan su derecho!

Por tanto, como la lengua del fuego consume el rastrojo, y la llama devora la paja, así será su raíz como podredumbre, y su flor se desvanecerá como polvo; porque desecharon la ley de Jehová de los ejércitos, y abominaron la palabra del Santo de Israel. 

Por esta causa se encendió el furor de Jehová contra su pueblo, y extendió contra él su mano, y le hirió; y se estremecieron los montes, y sus cadáveres fueron arrojados en medio de las calles. Con todo esto no ha cesado su furor, sino que todavía su mano está extendida.

Isaías 5:20-25 Reina-Valera 1960 (RVR1960)